Hace dos años fuimos a piscar mazorca en el campo,
cuando dio el medio, vimos a un señor gateando en un lugar empinado, desde una distancia
se observaba que tenía el rostro color rojo. Mi papá, mi hermano y yo fuimos
hacia él, al llegar ahí nos dimos cuenta de que era un joven ebrio con la cara
llena de sangre, nosotros tratamos de ayudarlo.
Nos habló acerca de su vida y nos contó que tenía
problemas en casa, por esa razón el consumía bebidas alcohólicas, desde
entonces, no he podido olvidar aquella experiencia.
Hola Basilisa te felicito por ser la primera en compartirnos tus experiencias personales. Éxito para la siguiente actividad...:-)
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